En Argentina, las elecciones han puesto en la boca de los ciudadanos la palabra encuesta, tanto para defenestrarlas como para seguir usándola para publicidad, más que como indicador.
Sobre todo, como principal actor, la empresa Poliarquía, principal entidad que gozaba hasta no hace mucho de cierto prestigio en sus predicciones, pero la realidad, finalmente la ha alcanzado.
La cuestión, para muchos, se reduce a una sola: los encuestados mienten.
Es posible que sea así, muchos miden la conducta ajena basada en la propia, pero decir esto es tan especulativo como las respuestas que se vienen dando.
La realidad, es que hasta ahora, las encuestadoras son poco serias, respecto al método, no al medio.
Algunos indican que mientras antes se realizaban encuestar en persona, enviaban decenas de encuestadores a las calles, y esa modalidad evitaba la falsa respuesta, ante los costos extremos, se recurrió al teléfono. Y el teléfono permite la mentira.
Ambos son modos, medios, pero no es el principal factor, cualquiera fuera el sistema de recabar el dato, tiene en cuenta este factor, el dato falso.
Lo que fundamentalmente pocos dicen es que en realidad, el método de encuestas responde a un riguroso muestreo para ser representativo, y que este muestreo, no se realiza de cualquier forma, sino que responde a un método bien determinado.
Un muestreo serio y confiable responde fundamentalmente al tamaño de la muestra. Que a su vez responde al número de la población total sobre la que se quiere estimar.
Esta muestra responde a una fórmula:
Tamaño de la muestra= (N σ 2 Z2 ) / ((N-1) e2 + σ 2 Z2)
Donde:
n = el tamaño de la muestra.
N = tamaño de la población.
σ =Desviación estándar de la población que, generalmente cuando no se tiene su valor, suele utilizarse un valor constante de 0,5.
Z = Valor obtenido mediante niveles de confianza. Es un valor constante que, si no se tiene su valor, se lo toma en relación al 95% de confianza equivale a 1,96 (como más usual) o en relación al 99% de confianza equivale 2,58, valor que queda a criterio del investigador.
e = Límite aceptable de error muestral que, generalmente cuando no se tiene su valor, suele utilizarse un valor que varía entre el 1% (0,01) y 9% (0,09), valor que queda a criterio del encuestador.
Los criterios para seleccionar un número que represente al votante, con algún criterio, no es necesariamente el padrón general, puede ser un número alternativo, como la cantidad de conductores de una ciudad. Esto es un criterio que tomaría personas mayores de 18 años con un nivel de vida que les permite manejar o tener vehículo.
Para Capital Federal, este número es de 1.864.000 conductores con registro de manejo.
Para una encuesta con esta población, la muestra mínima representativa, con valores por defecto, daría
(N-1) e2 = (1.864.000-1)*0.01= 186,3999
σ 2= 0,25
Z2 = 3,8416
(N-1) e2 + σ 2 Z2 =0,25+3,8415 = 4,0916
N σ 2 Z2 = (1.864.000 * 0,25 * 3,8416 ) / 4,0916
Tamaño de la muestra= (N σ 2 Z2 ) / ((N-1) e2 + σ 2 Z2)
Para este ejemplo, la muestra mínima representativa es aproximadamente, redondeando hacia abajo: 437.527
Poliarquia realizó una encuesta sobre 800 personas por teléfono, para dar respuesta a la tendencia electoral de las PASO.
Esta es la realidad, la poca seriedad de las encuestadoras dejan una estela de desconfianzas de sospechas sobre fraude, y una campaña donde la mentira se solapa sobre la ambición, pero la única realidad, además de los resultados post encuestas es que las empresas encuestadores acomodan el resultado para cobrar sus predicciones con métodos tan poco serios que es llamativa la confianza que los políticos depositan en sus propuestas.